Cada acción es un error en potencia esperando quince minutos de fama. Algunas equivocaciones son tan pequeñas que podrían ser clasificados como lapsus brutus y la vida sigue. Pero cómo […]
Cada acción es un error en potencia esperando quince minutos de fama. Algunas equivocaciones son tan pequeñas que podrían ser clasificados como lapsus brutus y la vida sigue. Pero cómo […]