El sindicalista, a quien un juzgado encontró culpable de ausencia laboral, atribuye su condena a “los poderosos”.
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Joviel Acevedo regresó al país y se encontró con un documento: el fallo en primera instancia de un juzgado laboral que autoriza al Ministerio de Educación destituirlo por no presentarse a dar clases desde el 3 de enero de 2005 hasta la fecha.Más que una resolución, el dirigente ve una persecucion, porque, dice, está impulsando cambios estructurales.En la siguiente entrevista, el líder magisterial argumenta sobre su posible despido, habla de conspiraciones y promete una batalla legal que puede llegar hasta instancias internacionales.
¿Qué piensa de la resolución del Juzgado Cuarto de Trabajo? Nos preocupa porque creemos que la jueza no actuó de acuerdo con las bases del Derecho, sino que recibió fuertes presiones por parte de algunos grupos de poder, que se esconden en el anonimato.
¿Quiénes conforman esos grupos? Ya los conocemos. Estoy hablando de los dueños del periódico que usted representa, Siglo Veintiuno, así como el Opus Dei y otros grupos. Hay algo detrás de toda esta persecución política ideológica.
¿Cómo se da esta persecución? Yo no peleo con los periodistas ni con los fotógrafos, porque ustedes son trabajadores igual que nosotros. Pero sí creemos que en Siglo Veintiuno se está abusando de la libertad de expresión, porque cuando hacemos un señalamiento, ellos dicen que les demos pruebas, pero cuando nos atacan, nosotros no pedimos pruebas.
¿Cómo se defenderá judicialmente? Estamos apelando, pero si no funciona, iremos a la Corte de Constitucionalidad. También se recurrirá a entidades internacionales como la Organización Internacional del Trabajo, la Oficina Internacional de Derechos Humanos y Amnistía Internacional. Aunque no lo creemos necesario, pues estamos en ley.
¿Los maestros podrían parar labores para apoyarlo?Eso lo decidirá la Asamblea Nacional, tras la reunión de emergencia de este sábado 23 en la Casa del Maestro. Yo no se los pediré, pero serán ellos los que digan si me quieren respaldar de esa forma.
¿Por qué no está de acuerdo con la sentencia?Los dirigentes sindicales tienen derecho a estar liberados de sus cargos, y el patrón se encargará de ver quién sustituye a la persona en el cargo. Los otros sindicatos públicos y privados tienen a gente liberada. ¿Cuál es el problema con que el Sindicato de Trabajadores de la Educación de Guatemala tenga a una persona, a un delegado a tiempo completo? ¿Por qué tanta atención?
La jueza indicó que una de las causales era no haber solicitado la autorización para ausentarse de labores…Si ella bajo juramento dice que eso no lo llevamos nosotros, está faltando a la Constitución.
¿Dónde está la autorización? Esos documentos están desde hace tiempo; están firmados por Vinicio Cerezo y también por la licenciada Arabella Castro, quien fue ministra de Educación en el tiempo del PAN.
¿Los funcionarios posteriores le dieron un permiso similar? Mire, desde que Vinicio Cerezo dejó de ser Presidente, cualquier otro mandatario lo hubiera anulado; pero nunca fue revocado. Todos lo han respetado, pues con ninguno hemos tenido problemas.
Desde 2005 hasta la fecha usted no ha ido a trabajar, pero ha cobrado su salario ¿Estaría dispuesto a devolver ese dinero?Que me lo demuestren. Si tengo que devolver el dinero, lo tendrá que poner cada maestro. Pero no vamos a llegar a ese extremo. Además, es un derecho adquirido.
¿Quiere decir que no se puede devolver el dinero?Es que a ese punto no vamos a llegar; y si llegamos, yo tengo ese derecho consuetudinario. Yo trabajo más que cualquier trabajador, de lunes a domingo; no tengo horarios de trabajo, no tengo nada. Pero esa es mi forma de ser y pensar. No vamos a claudicar en la lucha por una mejor educación.
