Danzas estelares de pobreza son el marco de mi ruta hacia la oficina.
Una señora que reza para no morir en la miseria
niños que aprenden en la escuela del vandalismo
pegamenteros que acosan al peatón para arrebatarle un quetzal
el smog se cuela en mis pulmones como un elemento familiar en la respiración
vagabundos que caminan pensando en tiempos mejores
Posibles maleantes observan a la multitud
Residuos de una sociedad consumista son la decoración cotidiana
Al final del camino… Una burbuja
Durante 6 horas ignoraré a la Guate del exterior para concentrarme en
mi trabajo
¿Huída cobarde? Desde este bunker, rodeada de personas plásticas
le declaro la guerra al consumismo y a la ignorancia del entorno
Me niego a ponerme la máscara
No me dominarán… no seré parte del rebaño

Debe haber una solución

Fotografía

almadormida.blogspot.com