Se va, se va el 2008… Una dulce agonía


Empiezo a escribir este post cuando faltan 12 horas para que este año llegue a su final. No puedo evitar imaginar cómo este año se aferra a sus últimas horas de vida. Suspiros por un pasado que se agrega a la colección de experiencias clasificadas bajo el tag 08.
Desde que estaba en el colegio tengo la costumbre personal de escribir una carta que va dirigida a la Lunatika del futuro, la Lunatika que leerá el recuento de los daños y sonreirá con los buenos recuerdos.
El recuento del 2008 oscila entre las alegrías, el miedo y la nostalgia. Pero más que todo, se caracteriza por haber sido el año de la transición, tanto en el plano mundial como en el laboral y por supuesto, el personal.
La tormenta ya terminó y ahora el arcoiris que queda en el panorama es prometedor. Mañana será un nuevo año e iniciará un nuevo ciclo que me espera junto a una gran lista de metas que espero cumplir. Para darme ánimos, contaré con la compañía de Mafalda jajaja, pues ya tengo agenda nueva y ella ha sido tan amable que se ofreció a manejar mis relaciones públicas. How nice of her!
Aparte, hay todo un stash de películas que orgullosamente participarán en una maratón familiar que se celebrará entre hoy y mañana. Nada como la familia.
Podrá parecer algo trivial, pero justo durante estas últimas horas de lo que fue uno de los años más difíciles para mí, es reconfortante aferrarse a esos destellos de esperanza y observar la dulce metamorfosis. Engañar un poquito a la mente y confiar en que mañana y el día después de mañana todo ira bien.
Así que, mis mejores deseos para ustedes, queridos lectores. Prometo tomar hoy un brindis a su salud y espero que a pesar del pesimismo mundial, las guerras entre Israel y Gaza, la debacle económica, los mareros, and so on and so on… Podamos agregar en la lista más experiencias de a huevo y buenas, mientras la columna del mal quede raquítica y de risa jaja.
Saludos y abrazos !

*Pic propiedad de Eyesores World